La televisión puede tener un efecto negativo en los niños de edades entre uno y tres años. Un nuevo estudio apunta que la visión de imágenes televisivas que se suceden rápidamente pueden sobrestimular el cerebro de los pequeños y causar problemas de atención durante su etapa escolar.
El trabajo, publicado en 'Pediatrics', abarcó un total de 1.278 niños de un año y 1.345 de tres. Los padres se encargaron de rellenar un cuestionario sobre los hábitos televisivos de sus hijos y, cuando éstos cumplieron siete años, analizaron su comportamiento empleando patrones similares a los que se utilizan para diagnosticar los trastornos de falta de atención.
Dificultad a la hora de concentrarse, actuar con cansancio y de forma impulsiva, y confundirse fácilmente. Éstos son algunos de los problemas de atención mencionados por los padres. Un 10% de los niños presentaron con siete años este tipo de trastornos.
El trabajo, publicado en 'Pediatrics', abarcó un total de 1.278 niños de un año y 1.345 de tres. Los padres se encargaron de rellenar un cuestionario sobre los hábitos televisivos de sus hijos y, cuando éstos cumplieron siete años, analizaron su comportamiento empleando patrones similares a los que se utilizan para diagnosticar los trastornos de falta de atención.
Dificultad a la hora de concentrarse, actuar con cansancio y de forma impulsiva, y confundirse fácilmente. Éstos son algunos de los problemas de atención mencionados por los padres. Un 10% de los niños presentaron con siete años este tipo de trastornos.
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